miércoles, 30 de noviembre de 2011

Sur Le Fil



Quedarte cinco minutos  mas, despierta después de decir buenas noches. Actuar el  dormir tranquilizador de los mortales, para pensar en el silencio que provoca la incertidumbre que se crea mientras todo gira rápidamente en torno a mi,y yo no se, simplemente no se  nada.
Frágil, vulnerable, sonriéndote para que te sientas seguro y te forjes con  el carácter de algo bueno.

Con la duda de saber si la mundo es mundo o todos se esconden en los errores y las  dudas.
Victima y presa  favorita para ser arrastrada como un fondo blanco de tela sobre la tierra y el lodo de los jardines en donde fueron asesinadas las mentes mas  brillantes de un destino sin futuro.
Permanecer en vela,para revolcar aun mas las ideas que no podrán ser resueltas,y despertar con los ánimos resueltos para sonreír por un minuto y programar la postura el resto del dia,y simplemente confiar a ciegas, como un ciego que le aterra la obscuridad, así de absurdo se vuelve  todo...

Y yo simplemente mantengo la fe y te sonrió, como a un niño de holocausto,y te hago creer que todo se encuentra bien.



Efectos secuandaríos.


A veces lo que quieres no se ve en las cosas que dejas, a veces las cosas se dicen cuando ya no hablas, a veces te llegan las letras volando entre el cemento y el smog del cielo y se te escapan cuando las tienes sobre el papel, entre dos estaciones del metro, entre dos respiraciones prohibidas, entre tú y el misterio  sentada en una banca de un parque cualquiera un martes a las seis  menos treinta de la tarde ... Y entendí que en la vida hay cosas así, que resultan ser efectos secundarios del misterio de la propia mente, proyectándose en eventos o casualidades difíciles de explicar, pero que se van convirtiendo en un estilo de vida de lo más normal, cosas que adivinas, cosas como que tu mirada solo busque el reloj a una hora precisa sin planearlo, levantar la vista justo en el momento para encontrarte con esa mirada, voltear a ver el teléfono segundos antes de que suena, palabras que dices al mismo tiempo que otro, presentimientos, amigos que llegan en el momento que más lo necesitas, dejá vu, amor verdadero, justicia divina, música aleatoriamente sorprendente. Llena de sombras, de noches y deseos, de risas y de alguna maldición.




El amor de los inocentes.






De esas veces que das la vida por tener a un personaje así a tu                   alrededor 

Benny & Joon  1993


De esas veces.

Cosas que te recuerdan que tu posición de ideas y forma de ser definitivamente están en lo correcto.





Todos creen que todo es muy  raro. Tu crees que independientemente de todo, es lo que te mantiene vivo.





Así es como juntos decidimos (sin previo aviso) jugar al ajedrez.



¿Quién los ve andar por la ciudad
Después de todo -pero después de todo-
si todos están ciegos ?
sólo se trata de acostarse juntos,
Ellos se toman de la mano: algo habla
se trata de la carne,
entre sus dedos, lenguas dulces
de los cuerpos desnudos,
lamen la húmeda palma, corren por las falanges,
lámpara de la muerte en el mundo.
y arriba está la noche llena de ojos.
Gloria degollada, sobreviviente
Son los amantes, su isla flota a la deriva
del tiempo sordomudo,
hacia muertes de césped, hacia puertos
mezquina paga de los que mueren juntos.
que se abren entre sábanas.
A la miseria del placer, eternidad,
Todo se desordena a través de ellos,
condenaste la búsqueda, al injusto
todo encuentra su cifra escamoteada;
fracaso encadenaste sed,
pero ellos ni siquiera saben
clavaste el corazón a un muro.
que mientras ruedan en su amarga arena
Se trata de mi cuerpo al que bendigo,
hay una pausa en la obra de la nada,
contra el que lucho,
el tigre es un jardín que juega.
el que ha de darme todo
Amanece en los carros de basura,
en un silencio robusto
empiezan a salir los ciegos,
y el que se muere y mata a menudo.
el ministerio abre sus puertas.
Soledad, márcame con tu pie desnudo,
Los amantes rendidos se miran y se tocan
aprieta mi corazón como las uvas
una vez más antes de oler el día.
y lléname la boca con su licor maduro.



Ya están vestidos, ya se van por la calle
Y es sólo entonces
                                             cuando están muertos, cuando están vestidos,
                                                    que la ciudad los recupera hipócrita
                                                          y les impone los deberes cotidianos.




Julio Cortázar                                                     vs                                                    Jaime Sabines

Todo.






Ayer fuimos prevenidos inclementes,

dolorosos impotentes,
suaves vestigios de fondos perdidos.


Anegados en los poros ahorcados,

atafagados

por el despiadado aroma de lo antiguo.




Estuvimos vencidos, escondidos,
relegados.




Antes, no ahora,
solíamos escondernos detrás de los árboles,
mimetizarnos entre los retales de las hojas,
solo porque temíamos seguir cayendo
en trampas para humanos.




Pero ya es suficiente,

el domo huracanado que vela nuestros muertos

se ha resquebrajado.


Y ha llegado el tiempo

de que la luz en la noche se encienda,


el instante de advertir la presencia

que deja la estela de parajes nuevos

que cursan por los ávidos cuerpos.

Hemos alcanzado la hora de volvernos pedazos

en aquellas habitaciones donde moran
los ancianos arcanos,
de destrozar el peso que nos hunde


y resurgir de los fluidos y las quimeras

como linces en la nieve.





Todo para quitarnos la herrumbre
que nos adormece.




Hoy, hace unos días, pensaba en elegías,

en dioses desterrando a los mortales de su paraíso.

En cambio hoy,


en este insaciable nuevo momento,

deseo tomarte de la mano

y llevarte a conquistar el Olimpo,
a ser juntos una nueva filosofía.




Hoy, ahora, no hay necesidad de protegernos.
Ni de nosotros ni de nadie.
Ya mismo somos piel y huesos y sangre,

elementos atados con cuerda de sueños,

la pureza de los seres que se llenan hasta el azar del nuevo día.





En este presente en que nada pesa y todo pasa
es donde te enseño (y espero seguirte enseñando)
que te quiero todo y ya.

martes, 29 de noviembre de 2011

Te pero no te.


"...voy juntando mis días,
mis minutos, mis horas
con tu hilo de letras."
Gioconda Belli

 (Video)

Te pero no te.
Té pero café.
Tinto atezado,
profundo y humeante
como la bruma que funde
el mar con la noche.

Te pero no te.
Como el viento de poniente
que se escurre por tu vientre
y la boca ha de llegar.

Te pero no te.
Transgresivo, trasegante,
trepidante,
como hordas de hipocampos
llevando a cuestas legionarios
que le rinden honores a la nada,
cazadores de las perlas
que hacen tu sonrisa.

Te pero no te.
Ciudadano a pie,
que deja el cuerpo inerte,
estorbo en el metro,
para emprender un febril viaje
donde la mente se enreda
y se resbala
entre los bucles del bosque de tu cabeza.

Te pero no te.
Menta y ébano,
la frescura que descongestiona los pesares
y estimula el hambre de pasiones
meciéndose en la ribera plutónica,
todo al tiempo.
Y al destiempo.
 Al desencuentro.
Te pero no te.
Como saborear un dulce ácido,
como partir una galleta.
Como jugar a la botella y dejar
embriagarse de ganas
y cometer crímenes pasionales
que solo los pasquines saben esbozar.

Te pero no te.
Como un veintisiete de Julio
o un cuatro de Agosto
o un treinta de Febrero.
Tan extensos que siempre
nos falta tiempo.

Te pero no te.
Indagando tu espejo,
tus reflejos de mañana,
las hendiduras de tu cuerpo
donde me escondo a pernoctar;
la línea de separación de tus labios,
de tu sexo viril, de tu fuerza, de tus manos,
todas y cada una camino de mi lengua.

Te pero no te.
Indicios sin perjuicio,
viaje inmóvil, ojo andante
rabia, altura, lanzamiento
raspadura y curación.

Te pero no te.
Encontrarte un día y sorprenderme que,
tú hilarante,
me ibas a enseñar a nadar.
A vadear mareas.

De la mano te (tomo),
pero del brazo no te (halo).
De la lengua te (agarro),
pero de la boca no te (suelto).
De los cuerpos que tenemos te quiero,
pero del alma de ideas  que soy Te asesino después de decirte Te amo
Para después quedar en la incertidumbre de saber quien realmente eres tu...

Y aun así arriesgarlo todo para que revivas suavesito y tomes té conmigo.





Cinco, seis. ¡Paraíso, infierno!


Cuando  RAYUELA suena a 

Gotan Project


"Me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar"...








"Exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja. "

"Y sentirte temblar contra mi como una luna en el agua."