sábado, 21 de abril de 2012

No me digan demente solo soy excéntrica .

Yo  seguía  el paquete que a
todos les engulle las manos.

Colocando  pañuelos  color rojo atados alrededor de sus gargantas para mantener sus cabezas y disimular la sangrienta verdad que sus cuerdas vocales rasgaba desde sus cortezas cerebrales, la cual fabrica las virulentas ideas humanas  hasta una tráquea que perfora la pobreza de sus cuellos.
Me volví dando vueltas, para observar alrededor de ellos. Observándolos a todos, se auto mutilaban sin hacer movimiento alguno, ahogándose con la propia sangre de sus gargantas.
Era como si una delgada y  filosa hoja los hubiera rosado mientras dormían.
Es fascinante mirarlos, pareciera  que sus pupilas formularan un lenguaje en común, se tornan dilatadas, desesperadas...
Como si me pertenecieran, como si realmente yo pudiera salvarlos de sus últimos momentos en medio de la  desesperación.
Es tanto el grado que realmente creen que yo puedo darles y quitarles la vida con la facilidad de un suspiro.¿No es acaso que solo soy un instrumento de Dios?  Prefiero observar la naturaleza de la vida.Del destino.
Un cadáver tiene una belleza y una dignidad que ningún cuerpo con vida puede alcanzar jamás. Hay una calma en la muerte que me tranquiliza... 


Fue cuando Oí los chorros y el goteo de la sangre en la estera al lado de las sillas.  La cosa entera duró cerca de tres minutos. Entonces salí, cerré la puerta otra vez y regrese a casa  para dormir.

No es demencia...solo excentricidad.

13 comentarios:

  1. De lo mejor de ti, eso es seguro!

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  2. No puedo creerlo eso merece una condecoración. Yo creía que era necesario conducir tanques y ganar guerras.

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  3. Fascinantes son tus ideas chuecas.

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  4. Malo que nunca dan el el nombre, digo, la cara... Haha.

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  5. fragilidad, tiene nombre de mujer.

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  6. En eso tiene usted razón. Se considera frágil?

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  7. Frágil no, y tampoco mujer.
    Las cosas se llaman equívocas cuando tan sólo tienen de común el nombre... Dicen que el hombre no es hombre mientras no oye su nombre de labios de una mujer.

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  8. No todo asume un nombre. Algunas cosas van más allá de las palabras al parecer.

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  9. Y entonces uno encuentra textos hasta en los comentarios de este blog, jaja siempre es sensacional visitarte por aquí.

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  10. El poeta no cumple su palabra si no cambia los nombres de las cosas... inténtalo.

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  11. Eso si es fascinante.

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